22 nov. 2008
Clavarios 2008: Dª. Rosa Gil Bosque y D. José Luis Ruiz del Puerto
Dª Rosa Gil del Bosque ha sido nombrada Clavariesa de las fiestas de Santa Cecilia, distinción otorgada por la Asociación de Profesores Músicos de Santa Cecilia. En esta ocasión, la distinción de Clavario recayó en D. José Luis Ruiz del Puerto.
En la celebración de la misa actuó la Orquesta y Coro del Conservatorio Profesional de Valencia cuyo director es Ricardo Callejo. El Director de la orquesta fue Pascual Martínez y la maravillosa voz que nos encandiló a todos, la de la soprano Lucía Revert.
Gracias por estos momentos.
16 nov. 2008 – Mara Calabuig
Una vida por la música
La Asociación de Profesores Músicos de Santa Cecilia homenajea a M.ª Rosa Gil.
La profesora de guitarra M.ª Rosa Gil
Decir guitarra es decir M.ª Rosa Gil, a este instrumento y a su pedagogía ha consagrado todo su saber, todos sus afanes; su existencia entera. Fue la primera mujer catedrática de guitarra en Valencia, y la segunda en España. Durante casi cuarenta años ha ejercido en nuestro Conservatorio una fecundísima labor docente y tras su jubilación en 1995 no ha cesado su empeño de apoyo y promoción de las actividades musicales centradas en ese «pozo, con viento en vez de agua», como llamó a la guitarra el grandísimo poeta Gerardo Diego.
Impresiona saber que M.ª Rosa Gil del Bosque es discípula conectada ‘sucesoriamente’ nada menos que con Francisco Tárrega, por intermedio de Pepita Roca, que lo fue directamente del insigne músico villarrealense, siendo a su vez profesora de aquella jovencísima Rosita que, tras sus inicios en El Micalet con el maestro Nácher Tatay, encontró en Roca la mentora decisiva que la encaminó en sus estudios, coronados por las más brillantes calificaciones.
La súbita muerte de Pepita Roca determinó que el inolvidable maestro Palau, entonces director del Conservatorio, ofreciera el puesto vacante a la aventajada alumna, convirtiendo a Rosita Gil en profesora del centro en plena juventud. «Interina y sin sueldo», puntualiza ella. «Y así continué una vez ganadas las oposiciones, hasta que se dotó la cátedra, siete años después. Eran otros tiempos».
Tiempos en que no se disponía de los medios actuales, y era muy difícil para una mujer proyectar una carrera como concertista. «Yo me planteé: ¿qué es lo mejor que puedo hacer en mi vida profesional?». Y decidió dedicarse a la enseñanza, transmitir a los demás no sólo la sabiduría técnica, sino también el entusiasmo, motor sustancial de todo aprendizaje, más aún en el arte musical. En el que Rosa, por su parte, no cesaba de profundizar. Asistió periódicamente a clases personales de Narciso Yepes, de Regino Sáinz de la Maza en Madrid, de Emilio Pujol en Siena, de Andrés Segovia en Santiago. «Eran distintas -dice-, pero todos me aportaron mucho, para poder ayudar a otros». ¡Y tanto que ayudó! Cuando llegó a las aulas del Conservatorio como docente se encontró con cinco alumnos. Unos años después eran setecientos. «Tuve que pedir refuerzos, auxiliares, porque era imposible atender a todos».
Profesora de maestros
Las directrices pedagógicas de M.ª Rosa Gil han sido una cantera asombrosa de brillantes alumnos, que hoy día nutren a su vez numerosas cátedras en España y fuera de ella, obtienen premios, frecuentan las salas de conciertos y los estudios de grabación. Algunos nombres conocidos, entre docenas de ellos: Miguel Barberá, Pedro Ibáñez, Manuel Abella, Santiago Rebenaque… «He tenido mucha suerte con mis alumnos -proclama-. ¡Me han dado tantas satisfacciones! Si no enseñé mejor, es porque no sabía más», concluye modestamente.
Del ilusionado grupo de músicos que en 1950 fundaron la asociación Amigos de la Guitarra pervive sólo M.ª Rosa Gil, piedra angular que ha contribuido con tesón a su mantenimiento. Sorprende la trayectoria de esta entidad cultural por el contraste entre sus limitadas posibilidades y sus grandes logros. En casi seis decenios de existencia, Amigos de la Guitarra -que Rosa Gil presidió durante veintitrés años, ostentando actualmente la presidencia de honor- ha traído a Valencia a los más ilustres concertistas y conferenciantes. Cursos, seminarios, jornadas musicales llenan una ejecutoria de gran altura. «Siempre pensé en ofrecer a mis alumnos lo mejor, en pro de su constante puesta al día y progreso. Yo también aprendía, porque estaba allí la primera, y todo es poco en este campo. La guitarra es un instrumento difícil, pero cercano, que se palpa, al que se extrae el sonido con la propia mano, sin vehículos intermedios. Mi más íntima aspiración es contribuir a que el interés por la guitarra se mantenga y crezca todo lo posible».
Recientemente, los miembros de la Asociación Amigos de la Guitarra han celebrado un concierto extraordinario para festejar el nombramiento de M.ª Rosa Gil como Clavariesa de las fiestas de Santa Cecilia, distinción otorgada por la Asociación de Profesores Músicos de Santa Cecilia.
El sueño de esta maestra: conseguir que exista un gran concurso de guitarra en Valencia. Y su sello personal, que marca un próximo CD impulsado y patrocinado por ella: el hermoso diseño de una rosa apoyada sobre las cuerdas. Toda una definición de Rosa Gil y su matrimonio indisoluble con la guitarra.
Fuente: Artículo de Las Provincias. 16 nov. 2008: Una vida por la música. La Asociación de Profesores Músicos de Santa Cecilia homenajea a M.ª Rosa Gil.